Nochevieja es una de las noches más mágicas y especiales del calendario. La familia y los amigos se reúnen para despedir el año y dar la bienvenida al siguiente con el deseo de que este solo traiga buenas sorpresas. Y una de las formas que hay de asegurarse ese buen porvenir es comer las 12 uvas al paso de las campanadas. Son muchas las historias que hablan del origen de esta tradición, y una de las más aceptadas expone que en el año 1909 se produjo una cosecha excelente de uva. Los productores no fueron capaces de dar salida a todo el producto por lo que, en vez de dejar que este se estropease, decidieron ponerlas a la venta con el nombre de 'uvas de la suerte'. Sin embargo, España no es el único país que tiene una costumbre en torno a Nochevieja, sino que alrededor de todo el mundo se pueden encontrar tradiciones que son de lo más curiosas.
La predicción de la suerte en Alemania
Una de las tradiciones más curiosas que se pueden encontrar es la de Alemania a la hora de pronosticar la suerte que traerá el año nuevo. Este ritual, que también se practica en Austria, recibe el nombre de 'Bleigieben' y se basa en fundir un poco de plomo y dejar caer unas gotas en un recipiente con agua. La forma en la que el material se solidifique en contacto con el líquido revelará la suerte que la persona tendrá durante el próximo año. Por ejemplo, los símbolos de la buena suerte son una bola o un ancla; mientras que si es una flor es de esperar que lleguen nuevas amistades, y sorpresas en el caso de un sombrero. Eso sí, lo que nadie desea que le salga es la temida cruz. Además, otra costumbre curiosa del país alemán es cenar lentejas esa noche.
Turquía se viste de rojo
El vestir ropa interior de color rojo es una costumbre que tanto España como Turquía comparten. La razón es la misma: atraer la buena suerte para el año que está entrando. Esta tendencia a relacionar el buen porvenir con la vestimenta también está muy arraigada en otras tradiciones como es la de Argentina, donde es costumbre lucir una prenda rosa, mientras que en Colombia se opta por el amarillo. En el caso de México, el color es elegido según se busque dinero, suerte, amor... Por su parte, en Filipinas es costumbre vestir alguna prenda con estampado de lunares para atraer al dinero y a la prosperidad. Además, lo ideal es que estas prendas tengan bolsillos para poder llenarlos con algunas monedas y que estas choquen entre sí cuando el reloj toque las 12 de la noche.
Cuidado con quién entra por la puerta en Irlanda del Norte
Esta es una de las tradiciones más interesantes para Nochevieja, y es que los irlandeses tienen la teoría de que la primera persona que cruce el umbral de la casa en el día de Año Nuevo será quien traiga suerte y buen porvenir a ese hogar. Por ello es costumbre que el invitado se presente con algunos presentes. Esta tradición también se comparte con sus vecinos ingleses, que creen que quienes mejor suerte atraen son las personas morenas.
En Grecia no se decora un árbol
Mientras en muchos países del mundo es costumbre decorar con luces y bolas de colores un árbol de Navidad, los griegos lo cambian por un barco. Y es que el 31 de diciembre ellos no celebran Nochevieja como tal, sino la llegada del Agios Vassilis -su Papá Noel particular-. Este se presenta con regalos en forma de dulces como es la torta de San Basilio, en cuyo interior se puede encontrar una moneda que atraerá la suerte a quien la encuentre, tal y como ocurre con la sorpresa escondida en el Roscón de Reyes.
Los daneses tiran la vajilla
La celebración de Fin de Año en Dinamarca puede ser una de las tradiciones más divertidas y antiguas: tirar platos viejos al sonar la última campanada. Sin embargo, estos no se tiran al suelo, sino que hay que golpear con ellos las puertas de amigos y vecinos para demostrar cariño y afecto. Otra tradición, en este caso para atraer la buena suerte en el nuevo año, es saltar encima de una silla justo cuando suene la última de las campanadas.
En Brasil es protagonista el blanco
Durante la última noche del año, muchos brasileños se acercan a la playa para llenar la arena de velas de distintos colores. Cada una de las tonalidades tiene un significado: las velas blancas atraen la felicidad, las amarillas la riqueza y las rojas tienen como objetivo encontrar el amor. Estos colores también se aplican a las prendas que lucen durante Nochevieja, siendo el blanco el más importante al ser símbolo de felicidad y pureza. Además, otra costumbre es que las mujeres rindan homenaje a la diosa del mar, Yamanja. El objetivo es atraer la fertilidad esparciendo flores en el mar y soltando pequeños barcos con velas y dulces.
El Fin de Año chino
A pesar de que en China no se celebra la última noche del año el 31 de diciembre -sino el 21 de enero-, esto no quiere decir que no tengan sus propias tradiciones. Una de ellas es limpiar y ordenar la casa para dejarla en perfecto estado y, durante la última hora del año, abrir las ventanas para que la buena suerte invada todas las habitaciones. Por su parte, las mujeres solteras también tienen su propio ritual para encontrar el amor: lanzar una mandarina al mar con su nombre escrito en ella.
Oda al amor en Estados Unidos
Los estadounidenses celebran las festividades por todo lo alto y, en el caso de Nochevieja, lo hacen con un beso a esa persona especial justo en el momento en el que dan las 12 de la noche. De esta forma se aseguran de que tendrán amor durante todo el año.
El fuego toma las calles en Escocia
El 'hogmanay' es el nombre que recibe la fiesta del fuego con la que los escoceses celebran el Año Nuevo. Las calles se llenan de fuego y cabalgatas protagonizadas por vikingos o monstruos, una tradición que tiene como objetivo evitar la presencia de malos espíritus. Otra celebración es el 'first-footing', la misma tradición que se sigue en Inglaterra o Irlanda en la que un invitado debe visitar la casa justo a las 12 para traer buena suerte al hogar. ¡Y mejor si lleva una botella de whisky!
Puerto Rico opta por el agua
Mientras en Escocia es protagonista el fuego, en Puerto Rico lo es el agua. La costumbre reza que hay que tirar cubos de agua desde la ventana de casa para limpiar las calles de cara al nuevo año y alejar los problemas del anterior.
En Rusia dan la bienvenida a Papá Noel
Al igual que ocurre en Grecia, en Rusia llega su particular Santa Claus en la noche del 31 de diciembre al mismo tiempo que celebran Nochevieja. La razón de esta curiosa tradición se debe a que durante la época comunista se prohibió celebrar Nochebuena el 24 de diciembre y pasó a celebrarse de forma clandestina el día de Fin de Año. Ahora esa costumbre está muy arraigada en muchas familias rusas que reciben a su Papá Noel cargado con regalos y dulces para todos los niños. Eso sí, los pequeños de la casa no lo tienen fácil para conseguir sus presentes y tienen que cantar, bailar y recitar un poema para ganárselos.
Colombia hace la maleta
Si eres de esas personas a las que les entusiasma viajar, anímate a seguir la costumbre colombiana. Allí se hace la maleta el último día del año y se sale a dar una vuelta a medianoche por el barrio. La razón no es que se vayan de viaje, sino que es la forma de atraer planes de viaje para el año nuevo.
Las campanadas japonesas
Las campanadas de Nochevieja son imprescindibles en casi todo el mundo, al igual que en Japón. La diferencia es que mientras lo normal es que sean 12, en el país nipón tienen 108. Esta costumbre se llama 'joya no kane' y la idea es que los templos budistas toquen esas 108 campanadas como representación de los 108 pecados que se conocen en esa religión. Los japoneses no tienen que tomar una uva por cada campanada, pero escucharlas todas purifica el alma eliminando cada uno de los pecados que representan.
Cenar lentejas en Italia
Al igual que ocurre en Alemania, en Italia también es costumbre que en el menú de Nochevieja estén presentes las lentejas. El objetivo es atraer la suerte y el dinero siguiendo la antigua tradición romana, por la cual en esa noche se regalaba una bolsa de cuero con lentejas que se creía que podían transformarse en monedas de oro.
En Chile se celebra Nochevieja en un cementerio
En la ciudad de Talca se tiene la costumbre de acudir al cementerio a las 11 de la noche con la idea de celebrar Nochevieja con quienes ya no están a la luz de las velas y con música clásica.